La accesibilidad urbana es un tema fundamental para la democratización del derecho de ir y venir en las ciudades. Se trata de un conjunto de medidas destinadas a garantizar que todas las personas, independientemente de sus condiciones físicas, tengan las mismas oportunidades para utilizar los espacios públicos y privados de forma autónoma y segura. Si bien es un derecho garantizado por la ley, aún queda mucho por avanzar en su implementación efectiva.
Un proyecto accesible engloba varios aspectos que son fundamentales para garantizar la inclusión y la movilidad de todos. Uno de los puntos clave es la adecuación de las infraestructuras urbanas, incluyendo aceras, vías públicas, plazas y edificios, para hacerlas accesibles a personas con movilidad reducida, como personas mayores, personas con discapacidad física o personas con cochecitos. Esto incluye la eliminación de barreras arquitectónicas, la creación de rampas de acceso, la instalación de pasamanos y la adecuación de ascensores.
Rotas Acessíveis
Con el objetivo de crear una ciudad aún más integrada, nacieron proyectos como Rotas Acessíveis. La propuesta es crear rutas a partir de la necesidad de desplazarse entre estaciones de transporte público y puntos de interés para personas con discapacidad o movilidad reducida. Ejemplos de estos puntos serían: hospitales, servicios públicos, escuelas, colegios, centros comerciales, teatros, parques, entre otros.
En São Paulo, el proyecto piloto de Rotas Acessíveis incluyó 6 rutas: Vila Clementino, Barra Funda, Marechal Deodoro, Ipiranga, Linha Azul y Centro y actualmente están presentes en el Plan de Metas 2021-2024 de la Ciudad de São Paulo. También ganaron espacio en el Plan Vida Segura, establecido por el Decreto 58717/2019, con proyectos que deben basarse en estándares de accesibilidad.